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Si bien se trata de un fenómeno que no se da todas las semanas o meses, no pasa una temporada sin que se registre alguna fuerte tormenta de viento que levante arena en los desiertos.

Lo cierto es que muchas veces, las grandes tormentas de arena llegan a las ciudades y generan grandes problemas, ya que la gente no puede estar en la calle, porque no se puede prácticamente respirar y además de las casas que se afectan, son los vehículos quienes se llevan la peor parte, ya que dependiendo de la cantidad de arena que pueda entrar en el motor o de cómo trate a la carrocería, los daños pueden ser inmensos.

Lo que más nos llama la atención es que cuando hay advertencia de este tipo de fenómenos, la ciudad se evacua de la mejor manera y parece ser que nadie viviera allí, ya que la gente entra a sus casas o edificios y los vehículos se tapan con lonas o quedan bajo techo.
foto vía:elcortox

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